Fiorella Haim, gerente General de la iniciativa, detalló que se están trabajando en tres áreas para lograrlo. En escuelas primarias, ya hay 40 establecimientos con un piloto en curso, en el que se brindan clases de pensamiento computacional a niños de 10 a 12 años. “Este tipo de pensamiento consiste en resolver los problemas, no necesariamente a través de código, sino tomando pequeñas partes, haciendo abstracciones o diseñando algoritmos”, destacó.
En escuelas secundarias, se están transformando laboratorios de computación en laboratorios digitales para que estudiantes de 12 a 15 años utilicen impresoras 3D, robótica, sensores y kits audiovisuales. “En este caso, se ven problemas y modos de resolver que están relacionados con sus vidas. Por eso está ayudando a reducir la deserción escolar”, dijo Haim.
Por último, para jóvenes de 17 a 26 años, se diseñó un programa de nueve meses para capacitación sobre programación. La iniciativa está coordinada con empresas de TI, las clases se hacen vía videoconferencia y existe la posibilidad de pasantías.