La tecnología de telecomunicaciones juega un papel fundamental en todas las fases de la gestión de desastres. El foco debe ponerse en aliviar el desastre y en asegurar el funcionamiento de las redes y la recuperación de información clave”, dijo el asesor del Ministerio de Comunicaciones de Japón, Hideo Imanaka.
Según datos de la División Research de la UIT, durante 2016 más de 445 millones de personas en el mundo sufrieron consecuencias por desastres naturales, 26 millones de personas quedaron en la pobreza y los destrozos generaron pérdidas por US$ 250.000 millones. Para Vanessa Gray, Senior Analyst de UIT, la función de los sistemas de telecomunicaciones comienza, en muchos casos, antes de que ocurra el evento: “(…) con el seguimiento de los huracanes, haciendo predicciones del impacto, generando alertas para las comunidades, y facilitando información que pueda salvar vidas".