Los principales operadores del servicio móvil brasileño, las empresas proveedoras de equipamiento y entidades representativas, presentaron sus propuestas en la consulta pública lanzada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Innovaciones y Comunicaciones (MCTIC), respecto de la elaboración de las políticas necesarias para el desarrollo de 5G en el país.
Ericsson propuso al gobierno la utilización de la mayor parte del espectro existente para los servicios móviles 5G, inclusive algunas de las bandas que actualmente están destinadas a las telecomunicaciones satelitales. Su propuesta contiene un plan que contempla para 2020 la venta de espectro en las bandas de 3,5 GHz, 26 GHz (ya previstas) con el agregado de la banda de 28 GHz, hoy utilizada por la banda ancha satelital. Para 2022 sugiere la venta o liberación de las bandas de 600 MHz, 1,5 GHz, de 3,6 GHz a 3,8 GHz, y de 37 GHz a 43,5 GHz. Para 2024 le agrega las bandas de 470-698 MHz, la de 3,8 GHz a 4,2 GHz (utilizada por la banda C); la de 4,4 GHz a 5 GHz, la de 5,9 GHz a 7,1 GHz; la de 15 GHz; la de 45 GHz a 52 GHz y la banda de 66 GHz a 71 GHz.
Por su parte, el operador Oi señaló que la compartición de infraestructura será fundamental para el buen desarrollo de 5G en el país. “Debe estimularse la compartición de infraestructura activa y pasiva entre los prestadores, incluyendo los postes, torres, ductos y conductos, por medio de incentivos para la compartición voluntaria", expresó la empresa en su presentación al MCTIC.
En el caso de Claro, la necesidad de extremar la limpieza de la banda de 3,5 GHz fue el eje central de su propuesta para la próxima licitación de espectro para la tecnología 5G. La empresa sostuvo que “el proceso de mitigación de las interferencias debe estar muy bien mapeado en todas sus etapas, que deberán ser debidamente descriptas en el pliego de condiciones, para que los posibles interesados en la banda de 3,5 GHz tengan pleno conocimiento de sus variables, sus responsabilidades y costos incluidos, evitando sorpresas y discusiones que puedan atrasar o inviabilizar el uso pleno de esa frecuencia por parte de los adquirentes”.
Telefónica de Brasil dijo al Gobierno que el éxito de la próxima licitación de espectro para 5G dependerá de dos factores: el equilibrio en la licitación de las frecuencias y la seguridad jurídica para la operación de las empresas. En su propuesta remarcó la necesidad de evitar una licitación con fines recaudatorios. “Debe perseguirse el objetivo de precios reducidos y condiciones justas de competencia, además de compromisos de inversión razonables en términos técnicos y económicos”.
La propuesta de TIM está centrada en establecer un escalonamiento de las inversiones obligatorias en infraestructura que deberá contener el pliego de condiciones. Sostuvo que las metas exigidas pueden ser de acceso, en línea con lo ocurrido en anteriores licitaciones, pero considera que no sería la mejor solución. “La infraestructura de transporte, por su potencialidad habilitadora de otras tecnologías y un aumento en la competencia de los accesos, podría provocar mejores resultados a mediano y largo plazo que enfocarse en la universalización de los accesos”, destacó TIM.