Según Alejandro Fosk, SVP de ComScore América Latina, el tráfico no humano se define como aquel que se genera (independientemente de su intencionalidad) por fuentes inválidas tales como bots, (sistemas que imitan usuarios humanos), adware y software -que capturan al navegador para crear anuncios sin el conocimiento del usuario-, inyectores de anuncios en sitios web y falseo de sitios que roban ventas publicitarias.