El portavoz del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, Hua Chunying, señaló que “politizar un asunto comercial y utilizar mecanismos nacionales para perjudicar a las empresas chinas no sigue las reglas del juego y va contra las leyes". Agregó que “estamos preocupados por esta investigación y tenemos dudas sobre los verdaderos motivos que hay detrás de ella".