Movistar encaró 2019 con plena conciencia de que no habría avances concretos en términos de evolución hacia la próxima generación tecnológica, y se concentró en mejoras de calidad y un fuerte trabajo con el sobre consumo. Posicionado en un “eje de la conveniencia”, ofreció alternativas para el 25% de los clientes que cada mes consumen toda la capacidad de su plan de datos contratado. Incluso, una tercera parte de ellos lo agota de modo recurrente.