El desembarco del 5G en Argentina, previsto para, al menos, la segunda mitad de 2022, sumado a IoT e inteligencia artificial, serán los potenciadores de una arquitectura de data centers híbrida, con predominio cada vez mayor del Edge, es decir, de centros colocados en el borde de la red a menor distancia del usuario final. Lo cierto es que los proyectos de data centers hiperescala eligen otros países de la región donde establecerse –Chile es el predilecto, seguido por Colombia y México, con recientes proyectos de Google, Oracle, Microsoft-, por lo que en Argentina predominarán en los próximos dos a tres años las instalaciones de tipo Edge, en ciertos casos vinculadas a data centers de mayor envergadura en países vecinos.