Pedro Sánchez en Davos - Crédito: Gobierno de España

El paso del presidente español Pedro Sánchez por el Foro Económico Mundial dejó diversos mensajes ligados al sector tecnológico. En su discurso, realizado tras la presentación de su par argentino Javier Milei, el mandatario ibérico se pronunció en contra de una reducción drástica del sector público: “Los españoles saben que las políticas neoliberales no funcionan, que la opción de reducir el tamaño del sector público y dejar solos a los ciudadanos y a las pequeñas empresas cuando surgen los problemas, no tiene sentido. Cuando colaboramos y estamos juntos, somos más fuertes”, recalcó.

El Gobierno español viene de decidir, hace pocas semanas, la adquisición del 10% de Telefónica, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI, una empresa pública española). Esta movida implica la vuelta del Estado al capital de la telco, a 26 años de su privatización.

En términos geopolíticos, el ingreso estatal sucede tras la adquisición del 6,5% de Telefónica por parte del operador saudí STC, que incluso planteó la posibilidad de realizar una serie operaciones financieras que elevarían esa participación al 9%. Finalmente, STC desisitó de ejecutar ese paso.

En una entrevista con Bloomberg como parte de su viaje a Davos, Sánchez fundamentó la decisión en la necesidad de reforzar la ciberseguridad de España, y para ello el Estado opta por una "relación público-privada con el fin de hacer frente común a estos desafíos".

Como parte de su discurso oficial en Davos, Sánchez planteó como reto a la gobernanza de la IA. Consideró que debe encararse con foco en “los derechos fundamentales de los ciudadanos, por encima de los intereses de estados y corporaciones”, y llamó a prestar más atención a trabajadores, jóvenes y mayores, “y menos atención a las promesas vacías de algunos gurús de Silicon Valley, que están más interesados en ganar adeptos o escalar en la lista de millonarios de Forbes que en el verdadero progreso de la humanidad. Los que aprendimos a no creer en la mano invisible del mercado, no podemos profesar ahora una fe ciega en la mano invisible de la Inteligencia Artificial. La invisibilidad suele buscarse para hacer el mal, no el bien. Sólo confío en las manos de carne y hueso”.

Se postuló como un “firme defensor del progreso tecnológico”, y elogió a la digitalización, como “buena y necesaria”. España, en este sentido, “está decidido a tener un papel protagonista en la revolución industrial actual”, aseguró.

El mandatario español también hizo referencia, durante la entrevista con Bloomberg, a “la batalla geopolítica por los semiconductores”, en la que, en su opinión, “la Unión Europea puede desempeñar un papel clave". En este sentido adelantó que España destinará € 12.000 millones a captar inversión para crear un nuevo ecosistema de semiconductores y chips: "Tenemos buena cooperación con empresas como Intel, Cisco y Qualcomm y esperamos fortalecerla aún más", indicó.