Vender la cartera de clientes de televisión satelital era una de las condiciones que impuso la Fiscalía Nacional Económica para aprobar la integración entre VTR y Claro. Como las partes unían sus negocios de telecomunicaciones, la FNE impuso esa condición para evitar eventuales efectos adversos en la libre competencia local: VTR provee conexiones alámbricas, mientras Claro juntaba accesos alámbricos y satelitales.