A partir del denominado “Lava Jato” por el cual políticos de catorce partidos se encuentran presos o procesados por casos de corrupción, la Justicia brasileña ha pasado a convertirse en los últimos años en un vértice fundamental en la vida cotidiana. En ese marco, no podía estar ajeno el sector de las telecomunicaciones, que en los últimos tiempos ha visto la judicialización de los más variados temas. El último: el contrato firmado entre la estatal Telebras y la estadounidense Via Sat, para la explotación comercial del primer satélite brasileño, el SGDC-1.