Tras la fusión Telecom-Cablevisión, Telefónica trata de hacerse fuerte en su área sur original, actualizando sus obsoletas redes de cobre para poder dar servicios múltiples sobre fibra al hogar. Claro experimenta con Internet y compite con precios y gran ancho de banda en sitios del conurbano con el objetivo puesto en la necesidad de tener fibra para complementar en sus servicios de banda ancha móvil, cuya demanda crece exigiendo velocidad y capacidad.