Las empresas Claro y Telmex ya cuentan con una red propia de fibra óptica que recorre la Argentina y le dará a los operadores de capitales mexicanos un mejor perfil para competir en el mercado de telecomunicaciones. La red tiene un total de 15.000 kilómetros y las obras se desarrollaron durante los últimos tres años con una inversión de US$ 165,88 millones.
La inauguración se realizó en la localidad de El Calafate, provincia de Santa Cruz, con la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner; el ministro de Planificación Federal Julio de Vido; Carlos Zenteno, director general de Claro y Víctor Cortez, director general de Télmex.
La red vincula ciudades y pueblos de todo el territorio nacional con fibra óptica de última generación. Corre desde San Salvador de Jujuy hasta Río Gallegos, y de la ciudad de Neuquén a Mar del Plata, y une Mendoza y Buenos Aires en su trazado de este a oeste.
Próximamente se desplegarán tres tramos más, con una extensión superior a los 750 kilómetros, conectando zonas urbanas y rurales del país, con una nueva inversión de US$ 20,31 millones.
La fibra óptica propia le permitirá a Claro y Telmex competir desde otra perspectiva en los servicios de Internet de alta velocidad, aplicaciones de voz, video y datos. La empresa logrará además algunas economías al utilizar su propia red y reduciendo la interconexión a la red pública de Telefónica y Telecom.
De todos modos, según pudo establecer Convergencialatina, algunos tramos de la red se complementan utilizando las facilidades de Telcosur y Silica, dos carrier independientes que cuentan con tendidos de fibra en la Patagonia y la zona cuyana, respectivamente.