El panel moderador por Oscar Gonzalez - Crédito: Convergencialatina
Esta mañana, en el primer Momento Latam.Space de la jornada, se discutieron los desafíos regulatorios de cara al despliegue de las Non-Terrestrial Networks (NTN) y D2D, así como los avances que dejó la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones 2023 (CMR-23) y los puntos que quedaron abiertos para 2027.
Con la moderación de Oscar González, consultor y abogado especializado en telecomunicaciones, el panel contó con la presencia de Jorge Ciccorossi, ingeniero senior de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT); Molly Gavin, VP de regulación internacional y política de espectro de la empresa estadounidense de servicios móviles por satélite (MSS) Omnispace; y por parte del Enacom, Jorge Colletti, encargado de la coordinación de estaciones terrenas, en la Dirección de Asuntos Satelitales, Dirección Nacional de Planificación y Convergencia, Enacom Argentina.
Ciccorossi comenzó describiendo la incorporación del D2D y las NTN en la agenda de la WRC-23 de la UIT celebrada en diciembre en Dubai. A partir de tres órdenes del día, puntualmente los ítems 1.12, 1.13 y 1.14, se discutió la asignación de frecuencias para MSS en baja capacidad en banda S (ítem 1.14) y S y L para IoT (ítem 1.12) y, si bien no se atribuyeron bandas específicas de frecuencia, se incluyó a partir del ítem 1.13 el tema D2D y un plan para el estudio de las bandas entre 694 y 2.700 Mhz para evaluar su posible uso en aplicaciones D2D. Estos estudios implican evaluar compatibilidad y posibilidad de interferencias con bandas adyacentes durante los cuatro años que quedan hasta la nueva cumbre de la UIT en 2027.
Respecto a la incorporación de este ítem sobre D2D en la agenda del WRC-23, la directiva de Omnispace resaltó las ventajas de los operadores MSS, que tienen iniciativas en D2D a partir de espectro satelital, por encima de los 2 Ghz. A diferencia de propuestas que emplean espectro de operadores móviles (como SpaceX, Lynk Global y AST SpaceMobile), empresas como Omnispace no necesitan ningún tipo de cambio regulatorio, ya que las frecuencias que usan están ya atribuidas a servicios satelitales móviles.