La huelga del United Auto Workers (UAW), el sindicato que agrupa a los trabajadores de las plantas automotrices y de autopartes de Estados Unidos, tiene razones económicas, como refuerzos salariales en medio de una escalada de inflación, pero también forma parte de una pulseada más amplia entre el gobierno federal de Joe Biden; las automotrices con trabajadores sindicalizados; Tesla, Toyota y otros productores con casa matriz en el extranjero; y la competencia global de autos eléctricos (EV por sus siglas en inglés).