“Cuando uno diseña la tecnología de base se logra soberanía tecnológica”, dijo a Convergencia Andrés Hohendahl, director de Servicios a Empresas de IAAR, la comunidad argentina de inteligencia artificial (IA). El grupo se define como crítico al establishment conformado por compañías extranjeras y defiende la creación local de tecnologías. Para lograr esta potencialidad, explicó Hohendahl, hace falta crear un entramado entre el Conicet, la Facultad de Ingeniería y las empresas locales. “Hay una cantidad de personas capacitadas para hacerlo, tienen los conocimientos y podrían ser agentes productores de tecnología de base, pero nadie está impulsando estas iniciativas”.